ÚLTIMO PARTE MÉDICO SOBRE EL CAPITALISMO

ÚLTIMO PARTE MÉDICO SOBRE EL CAPITALISMO

En una columna escondida, como las que Pagina 12 dedica a la lucha de los compañeros de Agr-Clarín (aunque de vez en cuando), el Financial Times de ayer informó que el crédito incobrable de la banca de la Unión Europea ascendía a 1.2 billones de euros – el 6% del total de 20 bil. A la de Italia se le atribuye el 30% del fardo – 360 bi, una cuarta parte de la cartera. En el caso itálico, 80 bi son definitivamente irrecuperables. Estas cifras surgen del llamado “stress test”, que alude a la resistencia de los bancos para no quebrar en caso de crisis. Cualquier especulador sabe que todo esto es sanata, porque el desarrollo de una crisis es imprevisible, en cuyo caso el ‘stress’ pondrá en ridículo al ‘test’. Observen que el informe no dice nada de los llamados ‘derivados’, que no son créditos a los clientes sino emisión de títulos de cobertura de riesgo o que responden a algún índice financiero. El monto de los derivados es insondable, pero se tiran cifras cercanas a los u$s 1000 billones a nivel mundial. Dado que Londres es la madre de los mercados derivados, a la Unión Europea (hasta que el Brexit ‘nos separe’) le corresponde la parte del león. Una década después de Bearn & Sterns y de Lehman Brothers, el capitalismo opera colgado de un piolín (como corresponde).

Antes de seguir con esto, un sitio australiano acaba de informar que su bello país ha decidido poner fin a la industria automotriz. Ford y Toyota ‘se n’e vanno’. La pérdida de empleos que ocasionarán estos cierres se aproximan a 200 mil trabajadores, que no podrqán encontrar ubicación en el mercado laboral, al menos de acuerdo al estudio. Las consecuencias se anuncian nefastas, asimismo, para el dólar australiano, pues el país deberá importar la totalidad de los carros que se venden en su mercado.

Con relación al ‘toxic debt’ de la UE, el Banco Central recomendaría utilizar fondos públicos para comprar los créditos incobrables, para luego intentar venderlos, al precio que sea, a los ‘buitres’ de ocasión. El Tesoro rescataría a los bancos, incluso violando una resolución del año pasado que exige que se haga a costa de los accionistas y de los acreedores ‘insecures’, y finalmente de los ahorristas con depósitos superiores a los cien mil euros. Como quiera que estado fiscal de los países europeos es calamitoso, se añadiría otra carga al contribuyente y más endeudamiento del Tesoro. Este el cuadro general que explican los ‘brexits’, los ‘trumps’ y las ‘le pens’, o la gravísima situación de Grecia, Turquía y Portugal.

Los australianos no le van a la zaga. El gobierno ya ha destinado 500 millones para las empresas que cierran, y otros 50 mil millones para construir doce submarinos. A diferencia de la crisis de los años 30 del siglo pasado, cuando Argentina, Brasil o hasta China (en guerra civil) la enfrentaron con una industrialización sustituta, en la actualidad, la crisis no deja títere con cabeza. Para Dujovne y Sturzenneger, que no leen los diarios pero si los extractos que les mandan los asesores.