NESTOR PITROLA: UN CANDIDATO DE Y PARA LOS LUCHADORES OBREROS Y SOCIALISTAS
nota publicada en: https://prensaobrera.com/politicas/36-
Ya no queda ninguna duda de que el campo de la lucha social y política se ha ampliado enormemente. Las grandes huelgas de los telefónicos y de los trabajadores de Metrovías son un testimonio de ello. Pero no se limita a los trabajadores: lo demuestra la fuerte sacudida social y política que provocó León Ferrari con su ataque revolucionario contra la Iglesia y por su uso explícito de la inspiración y creación artísticas para una causa política.
Nueva etapa
Ocurre que el Argentinazo abrió una nueva etapa, tanto en el desarrollo de la crisis del Estado capitalista como en la renovación de fuerzas de los trabajadores. Ahora resulta claro (por supuesto que para el que lo quiera ver) el alcance que ha tenido la lucha del movimiento piquetero desde su primera asamblea nacional en julio de 2001. Ha jugado (y lo sigue jugando, como lo testimonia el frente piquetero-petrolero en Santa Cruz y como lo testimoniará el próximo 20 de diciembre la Plaza de Mayo) un papel de enorme bisagra política entre todas las fases de la lucha –y no solamente con su movilizaciones–: fue el primero y hasta ahora el único que señaló el contenido capitalista del renacido ‘nacionalismo popular’ y sus insalvables limitaciones para proceder a una transformación efectiva del país. No es para nada casual que los movimientos sindicales que están conmoviendo a los trabajadores en estos días, sean precisamente los más vinculados al movimiento piquetero.
Superar al nacionalismo
Ocurre también que las contradicciones históricas, sacadas a la superficie por la bancarrota capitalista y la insurgencia popular, no podrán ser estranguladas con puras maniobras políticas. No solamente Duhalde fracasó en la tentativa de cerrar esta etapa, lo mismo le ocurre a Kirchner. El esfuerzo del nuevo equipo de gobierno por encauzar la crisis histórica en curso con una política de nacionalismo burgués (que, como siempre, combina una elevada dosis de demagogia con el invariable objetivo de regimentar al movimiento obrero) está sirviendo, contradictoriamente, para agotar las expectativas de las masas en las soluciones de contenido capitalista. La superación del nacionalismo burgués en el plano de la política y de la organización popular tendrá consecuencias decisivas. El desarrollo de una alternativa socialista está planteado como una consecuencia de esta situación objetiva.
Crisis del Estado
La crisis del llamado ‘canje de la deuda’ puso al desnudo que la ampliación del campo de las luchas y de la agitación social, no se procesa sólo ‘por abajo’. La presión del capital financiero internacional ha dividido al gobierno a un extremo tal que una crisis política más general es inevitable. Las fantasías nacionalistas de autarquía económica (‘vivir con lo nuestro’) se vuelven a estrellar contra la realidad de la economía mundial dominada por el capital financiero. Pero la burguesía nativa es incapaz , en última instancia, de resolver esta contradicción por una vía diferente a mayores ‘ajustes’ contra el pueblo. La colisión violenta de fuerzas que se manifestó hace tres años, en el Argentinazo, sigue presente como perspectiva en el marco de las actuales contradicciones sociales y políticas. La tregua entre Kirchner y Duhalde se vendrá abajo apenas se desate la crisis de gabinete. Como ocurrió antes con Alfonsín y De la Rúa, el derrumbe político será provocado por la deuda externa.
Crisis financiera inminente
La presión capitalista internacional por la deuda que quedó impaga es, sin embargo, el menor de los problemas que enfrenta el gobierno ‘nac & pop’. La hipótesis de pagarle al FMI y dejar colgados del pincel a los llamados ‘bonistas’ ha desatado un aburrido torneo de números. Pero el problema no es contable. El problema es el vaticinio que llega desde todos lados de que el ciclo económico internacional en curso acabará con una demoledora crisis financiera como consecuencia de los fabulosos desequilibrios que ha acumulado la economía mundial y en especial Estados Unidos. Las consecuencias del derrumbe del dólar golpearán por sobre todo a ese gran castillo de naipes que es la economía china. Es claro, de todos modos, que la próxima crisis financiera internacional barrerá con cualquier esquema de renegociación de la deuda argentina.
Alternativa socialista
La cuestión de la alternativa socialista está planteada, entonces, por toda la situación mundial. Es lo que reconocen, aunque por la negativa, los gobiernos ‘izquierdistas’ de América Latina encabezados por Lula, y seguidos, a partir de marzo, por el uruguayo. No pueden poner en práctica una política de reforma y de progreso social paulatino –al revés, se someten entusiastamente al FMI, a las privatizaciones y al vilipendiado ‘neoliberalismo’. Más aún, con el envío de tropas a Haití, para aliviar la presión de la ocupación de Irak sobre las tropas norteamericanas, los ‘izquierdistas’ se han transformado en cómplices de la colonización imperialista de Medio Oriente.
Derrumbe democratizante
No existe, entonces, una alternativa popular al gobierno actual que no sea una alternativa socialista. El reciente Encuentro ‘centroizquierdista’ de Rosario no solamente reunió a ex menemistas y a críticos ‘constructivos’ de Kirchner; no solamente juntó a banqueros, como Heller, que defienden como “soberanía monetaria” la acumulación de dólares para pagarle al Fondo; no sólo incluyó a todos los fracasados de la Alianza y a los representantes de la patria sojera, como el ‘socialista’ Binner; este Encuentro ni siquiera se planteó como alternativa de gobierno –esto por la simple razón de que pretenden contar a Kirchner como aliado.
Táctica política
La alternativa obrera y socialista toma en cuenta a las fuerzas populares que van ganando terreno en el campo político y social de la crisis capitalista, la crisis social sin precedentes y la tendencia al agotamiento del nacionalismo burgués. La alternativa obrera y socialista es un presupuesto estratégico de la táctica política cotidiana. Es de aquí que partimos para definir una política para las elecciones del 2005.
Elecciones 2005
Como cualquier otra elección, las del año que viene deben ser un terreno de delimitación política. Pero es altamente probable que se conviertan, al mismo tiempo, en un reflejo de la crisis del gobierno y de la crisis del peronismo, o sea en un terreno de realineamientos políticos. La delimitación política con los representantes de derecha y de izquierda del capitalismo, podrá servir, en tal caso, como nunca antes, para disputar fuerzas no solamente en el plano de las ideas sino también de la organización. El proceso político actual (no solamente las elecciones) tiene un carácter transicional. Debe estar al servicio de una alternativa obrera de poder, no para una cooptación parlamentaria por parte del Estado.
Llamado a los luchadores
Esta caracterización de la situación política del momento fundamenta nuestro llamado a todos los luchadores obreros y populares para que se movilicen políticamente por el desarrollo de una alternativa obrera y socialista. Esta alternativa es, a la vez, la vía que puede resolver en forma consecuente los problemas y necesidades planteados por la lucha y por la crisis, y una toma de posición para combatir el peligro de que este proceso político pueda ser desviado y confiscado por el nacionalismo burgués y su aliada de circunstancia, la izquierda democratizante.
Políticos de la clase obrera
Son numerosos las compañeras y los compañeros que pueden encabezar la lucha política por una alternativa obrera y socialista en la próxima campaña electoral. La encabezarán efectivamente, por otra parte, en las diferentes provincias y distritos electorales –pues se trata de una elección de renovación parlamentaria. El Partido Obrero intervendrá como partido y con candidatos de partido, y se esforzará por dar a la lucha electoral el carácter de una lucha de partidos. Pero hay una figura que puede unificar a los luchadores, como símbolo de toda la lucha popular de los últimos años –esa figura es Néstor Pitrola.
Pitrola
Néstor Pitrola es un luchador que ha ocupado todas las barricadas y trincheras de la lucha obrera y popular en los últimos treinta años, y una de las expresiones más consecuentes del movimiento piquetero. Representa a quienes lucharon por superar el desarrollo fragmentario del movimiento piquetero y lo convirtieron en una fuerza nacional. Representa también a quienes orientaron el desarrollo del movimiento piquetero como un movimiento de clase del proletariado, ligado a la lucha por la recuperación de los sindicatos y por la defensa de las fábricas ocupadas.
Representa, por último, a quienes enfrentaron en forma más consecuente las tentativas de cooptación del movimiento piquetero por parte del nacionalismo burgués y el Estado y, por lo tanto, a quienes han logrado, por primera vez desde los sindicatos clasistas de los ’70, que un movimiento de masas no caiga bajo la dominación de los políticos patronales.
En Néstor Pitrola se reúnen el luchador práctico de la clase obrera y el líder político que ha defendido y desarrollado en todas las luchas la independencia de clase de los obreros, sean ocupados o desocupados, y la perspectiva de una dirección política de la clase obrera.
Personalidad obrera
La personalidad política de quienes encabecen la lucha electoral en nombre de una alternativa obrera es fundamental, pues debe ejemplificar los mejores esfuerzos de la clase obrera para construir en la lucha sus instrumentos de emancipación social. Es una cualidad que deberán tener y que tendrán todos los candidatos obreros y socialistas en la próxima lucha electoral. Porque Pitrola encarna todos esos esfuerzos de construcción colectivos, debe ser el candidato que, desde la provincia de Buenos Aires, sirva para unificar a todos los luchadores que quieren una salida obrera y una salida socialista.
Reagrupamiento
Esta propuesta para que Pitrola encabece las listas como primer diputado nacional por la provincia de Buenos Aires, es también un llamado para que en todos lados, o sea en todas las provincias y municipios, se propongan como candidatos a los compañeros que en forma más consecuente personifican la lucha histórica actual.