EXC-ESSO

EXC-ESSO

nota publicada en: https://prensaobrera.com/politicas/727-

Página/12 hace un esfuerzo sobrehumano para dejar bien parado al gobierno, pero para ello tiene, naturalmente, que sacrificar la verdad. No es cierto que Esso haya “retrocedido”, como dice el diario, al retrotraer el precio del gasoil a su nivel previo, porque a cambio de esto obtuvo algo más apreciable —la reducción de los impuestos a la importación de ese combustible. El retroc-Esso lo produjo el gobierno, el cual había conminado a las empresas petroleras, el año pasado, a asegurar el abastecimiento de gasoil, para lo cual debían reducir las exportaciones, lo que no hicieron. Ahora se ve obligado a subsidiarles las importaciones.

Lo que Página/12 omite, sin embargo, al igual que el conjunto de los medios de comunicación, es que la justificación del subsidio (remediar la diferencia que existe entre el precio internacional y el interno, este último más bajo) es una falacia. Esso, al igual que el resto de los pulpos petroleros, comercializa su propio combustible, no lo obtiene en el mercado internacional. El costo de producción del petróleo es una parte ínfima tanto del precio internacional como del interno. El precio de 30 dólares el barril, en el mercado argentino, no hay que cotejarlo con los 58 dólares del mercado internacional, sino con la gama de dos a seis dólares que cuesta producirlo. Para el gasoil, como para la nafta, no existe incluso, exactamente, un valor internacional. El precio varía infinitamente entre los diferentes países (y no solamente porque difiera la carga impositiva): en Italia, la nafta está a 1,45 euro, o sea a casi cinco pesos el litro, mientras que en Estados Unidos oscila en torno a los sesenta centavos de dólar, o sea alrededor de dos pesos, al igual que en Argentina, a pesar de que tienen una carga impositiva completamente diferente. En tanto se trata de productos derivados o manufacturados, los precios del gasoil, la nafta o los aceites deben incorporar los costos industriales, que varían incluso más que los de la materia prima. A Esso no le cuesta lo mismo el gasoil que importa, según lo traiga de Bolivia o Estados Unidos. El llamado precio internacional que ha requerido que la importación sea subsidiada es para los pulpos un precio de transferencia entre sus sucursales, o sea un precio contable o de cuenta. En definitiva, Esso va a vender en Argentina el gasoil ‘importado’ con una enorme ganancia sin que para ello haga falta un subsidio estatal.

Como se ve, estamos frente a un EXC-ESSO y no frente a un RETROC-ESSO.